Si un ladrón entra en su casa, llamará a la policía para que lo detengan. Pero si un desconocido accede en su dispositivo electrónico, ¿a quién acudirá? ¡A los profesionales de la ciberseguridad!
En la actualidad, más hay más de 4.600 millones de usuarios en Internet y se prevé que el año que bien allá cerca de 28.500 millones de dispositivos conectados. Esto no significa otra cosa que la tecnología es parte de nuestra vida cotidiana.
Cada vez recurrimos más a Internet en nuestro día a día. Trabajamos, estudiamos e, incluso, nos entretenemos en nuestro tiempo libre. Por ello, nuestra exposición es mayor conforme la introducimos en nuestras rutinas.
Los ciberdelincuentes son conscientes de esto y aprovechan las debilidades para obtener su propio beneficio a nuestra costa. Esta es una de las problemáticas más importantes de este siglo.
Si no sabe qué es la ciberdelincuencia es afortunado porque todavía no tuvo que sufrirla, pero conocerla también es un modo de prevenirla.
¿Qué es la ciberdelincuencia?
Al igual que el entorno físico tiene riesgos, en la red también los hay. No está ajena a la delincuencia. Entendemos, por tanto, que la ciberdelicuencia es la realización de actividades delictivas utilizando los medios tecnológicos.
En este sentido, pueden atacar tanto a individuos como a empresas, e incluso, a gobiernos o instituciones públicas. ¡Nadie está ajeno a sufrir un ataque! Por ello, aunque no podemos ponernos una armadura impenetrable, sí que podemos realizar algunas acciones para prevenir los ataques.
Incremento de la ciberdelincuencia en todo el mundo
Cuando los delincuentes atacan un sistema su objetivo está dirigido a obtener beneficios. Son capaces de detectar el mejor momento para actuar y causar el mayor daño sin pensar en las consecuencias.
Desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU) vienen observando que en los últimos años los ataques en la red han aumentado considerablemente. Esto hace que la preocupación, sobre todo, por las infraestructuras críticas se haya incrementado.
Un ejemplo pueden ser los ataques cibernéticos deliberados a los centros de salud durante la pandemia. Cuando más necesario es que los sistemas no fallen y salvaguarden los datos, es cuando más expuestos están.
Por esta razón, tanto los colectivos públicos como los privados deben trabajar mano a mano para poder controlar esta amenaza. En este sentido, la ONU ha puesto en marca un grupo de expertos para que estudien y formulen recomendaciones que limiten los peligros que surgen en la red internacional.
¿Cómo lograr la seguridad en la red?
No hay una fórmula mágica que pueda protegernos ante cualquier ataque. Pero existen algunas recomendaciones que, al menos, se lo pondrán más difícil a estos delincuentes. Veamos algunas de ellas:
- Utilizar software de protección: este tipo de programas que instalamos en nuestros dispositivos y servidores pueden evitar virus o espionaje. Esta es una opción muy extendida pero no es infranqueable.
- Configurar contraseñas y encriptación para los mensajes: si un ciberdelincuente averigua tus claves de acceso, tendrá vía libre para consultar tus datos y actuar en tu nombre. El correo electrónico es uno de los puntos débiles donde más expuestos podemos estar.
- Realizar copias de seguridad externas y automatizadas: de esta forma, se podrán restablecer los datos o los sistemas de forma rápida minimizando las pérdidas.
- Recurrir a software en la nube: cuando utilizamos el almacenamiento en la nube, son las empresas proveedoras las que se ocupan de la seguridad. Estas tienen potentes sistemas que pueden ser claves para que los datos no sufran ataques.
- Evitar las redes públicas: tener wifi gratuito puede ser una gran tentación, pero comprometerá la seguridad de su dispositivo. Los atacantes podrán acceder a su dispositivo desde la red pública.
- Comprar en e-commerces seguros: asegúrese que las pasarelas de pago son fiables y haga todas las comprobaciones necesarias con su entidad bancaria.
- Limpiar dispositivos USB: puede que alguien le haya prestado un prendrive, antes de abrirlo o copiar los archivos en tu dispositivo, analícelo con su antivirus.
Por último, si tiene una empresa, no dude en contratar a un profesional que pueda garantizar la ciberseguridad en su negocio. Usted mismo podría convertirse en un experto con nuestra Maestría en Ciberseguridad.