En la actualidad, una de las mayores preocupaciones es la de cuidar el medio ambiente, por eso es cada vez más común que se recurra a la utilización de energías no contaminantes, es decir, de energía renovable.
La comúnmente llamada energía verde es la que se adquiere de diversas fuentes naturales que se tienen como inagotables. Las energías no contaminantes que contienen es inmensa y se renuevan por medios naturales. La energíaeólica, geotérmica, hidroeléctrica, mareomotriz y solar, son algunos ejemplos.
Las energías renovables y las no renovables
El fomento de las energías renovables y tecnologías emergentes es un aspecto que se aborda en la Maestría en Eficiencia Energética y Energías Renovables y se generan a partir de fuentes naturales. Pueden reemplazarse en una escala de tiempo relativamente corta. Las no renovables provienen de recursos que no son reemplazados o son reemplazados muy lentamente por procesos naturales.
Sin embargo, a pesar de ser elementos limitados hoy en día en el mundo, la energía fósil, que no es renovable, es la que más se ocupa. Ya sea en su forma líquida (el petróleo), de gas (el gas natural) o sólida (el carbón).
Si bien en un primer momento la energía no renovable fue una buena opción. Dado que sus moléculas tienen enlaces de alta energía. En el presente, se ha visto que no sólo hay un creciente problema en cuanto a las cantidades existentes en el planeta. Y que se consideran alcanzaran para unos 40 años más, sino que estas, además, son contaminantes.
La energía verde además de ser renovable es respetuosa con el medio ambiente, ya que su modo de obtención o la forma en la que se utiliza no genera subproductos que afecten negativamente al medio ambiente. A diferencia de los plásticos y polímeros que se acumulan dañando gravemente a diversos ecosistemas.
Tipos de energías no contaminantes
Entre las energías no contaminantes está la hidráulica, la cual tiene su fundamento en la energía potencial. Se va acumulando por los saltos de agua y cuyo fin es transformarse en energía eléctrica.
Las centrales hidroeléctricas se encargan de aprovechar la energía de los ríos. La recaudación de esta se traduce en un 15 % o más del total de la electricidad de algunas ciudades del mundo.
Este método es uno de los más importantes, cuantitativamente, dentro de las energías permanentes. Fuera de ser una fuente energética limpia y natural. Su obtención no depende de un coste de combustible extra para su funcionamiento. Sólo es necesaria la infraestructura para aprovechar el potencial de este recurso natural.
Por otro lado, en cuanto a la energía solar térmica, esta consiste en recoger la energía del sol. Mediante paneles solares y tomar el calor, para destinarlo a satisfacer diferentes necesidades. Por ejemplo, una de las más empleadas es la utilizada para obtener agua caliente. Ya sea para los hogares o para empresas e industrias.
Otro de sus usos consiste en dar calefacción, y quienes más lo ocupan son hoteles, colegios, fábricas e incluso conjuntos residenciales. Además, por su eficiencia se puede trasladar al medio de la agricultura. Esta energía, se puede aplicar a los invernaderos solares. Les proporcionará una mejora tanto en sus cosechas como en su calidad y cantidad en el producto.
Ventajas de las energías no contaminantes
Asimismo, gracias a la energía solar, se puede obtener también energía eléctrica. Incluso, no es necesario el conformarse con la radiación directa, es posible obtener elementos aprovechables de la radiación difusa.
Es por eso que una de sus ventajas, es que se puede obtener la energía en el lugar en el que se le requiere. Eliminando así la necesidad de transporte el cual contamina el medio ambiente.
En resumen, al utilizar este tipo de energía se reduce el uso convencional hasta un 25 %. Por eso, es cada vez más común ver que las nuevas viviendas son construidas para adecuarse a las tecnologías de la actualidad. Descartan la quema de combustibles fósiles y el daño ambiental.
Ahora bien, otra de las energías verdes muy empleada es la eólica. Se obtiene mediante la fuerza del viento.
Lo común es que se ocupen turbinas eólicas para que la energía cinética provocada por el viento se convierta en energía eléctrica. Al igual que las anteriores es una energía limpia. Hasta ahora, es la menos costosa en producir. Razón por la cual, es notable el actual crecimiento de los parques eólicos y la investigación para averiguar sus diversas aplicaciones.
El ahorro energético se está tomando cada vez más en cuenta para mitigar los efectos negativos de lo que era el consumo irresponsable de las décadas anteriores.
Los ejemplos antes presentados de los tipos de energías no contaminantes, nos demuestran que haya una eficiencia energética capaz de obtenerse fuera de los combustibles fósiles, pero sí que es realmente amigable con el medio ambiente. De seguir con este camino alternativo que nos brindan estas tecnologías podremos tener una oportunidad de un mejor futuro, estudiando Maestría en Gestión Integrada de Prevención, Medio Ambiente y Calidad.