Cuando usted pide un producto por Internet y a los pocos días está en su domicilio es gracias al transporte internacional. Cuando acude a su tienda de confianza y ha traído la fruta fuera de temporada, también lo es. Incluso cuando arreglan el pavimento de su ciudad, también puede estar relacionado.
La logística internacional es un elemento imprescindible dentro de la sociedad híper globalizada en la que vivimos. Sin ella, los bienes que disfrutamos en nuestro día a día podrían estar comprometidos. Ciertamente, es cada vez más común la dependencia entre los diferentes países.
En este sentido, durante la pandemia mundial se ha puesto de manifiesto esta necesidad de mantener las relaciones internacionales de interdependencia. De lo contrario, se perciben falta de suministros de materias primas y productos finales. Aunque es un problema generalizado, en algunos lugares la problemática es mayor.
Por este motivo, las empresas que desean iniciar su andadura en el exterior o mejorar sus procedimientos internacionales, deberían mantenerse al día en cuanto a normativas, tendencias y necesidades. ¿Cómo? Con formación especializada para profesionales y altos cargos en el mundo de la logística como nuestra Maestría en Logística, Compras y Transporte.
¿En qué consiste el transporte internacional?
La acción de transportar significa llevar algo o alguien de un sitio a otro. Si además, añadimos el concepto internacional, hablamos de un movimiento entre diferentes países. Por lo tanto, el transporte internacional consiste en un traslado de cosas o personas fuera del territorio.
En este caso, en este artículo vamos a centrarnos en el transporte de mercancías. No obstante, los medios de transporte internacionales permiten que las personas puedan viajar por todo el mundo sin limitaciones. Un aspecto que también es relevante a nivel empresarial y personal.
Siguiendo con la cuestión que nos atañe, cuando se mueven bienes fuera del territorio donde se producen o fabrican, hay que tener en cuenta las reglas de los países importadores. A la misma vez que se cumplen las normas del propio lugar de donde salen.
Pero además, es importante contemplar las opciones disponibles y sus ventajas dependiendo de qué se transporta y hacia dónde. Es decir, hay que pensar qué es más efectivo en cuanto a mantener el producto en perfectas condiciones. Así como limitar los gastos asociados y optimizar el tiempo de trayecto.
Tipos de transporte internacional
¿Sabe cuántas formas existen de transportar mercancías de forma internacional? ¿Podemos mandar productos alimentarios por vía aérea? ¿Qué medio terrestre es más rápido?
Seguramente, si está iniciando su andadura en el comercio exterior con su propio aparato logístico, le hayan surgido muchas de estas dudas. A continuación, le presentamos las tipologías y sus principales características.
- Marítimo: es el transporte internacional más utilizado en las operaciones comerciales. Como su nombre indica, utilizar el mar para realizar el traslado de las mercancías. Sus principales ventajas son su gran capacidad y su menor coste en comparación con otros medios. Dentro de esta tipología podemos encontrar diferentes formas de llevar la carga, dependiendo de los objetivos y del propio producto.
- Terrestre: se trata del movimiento de las mercancías por carretera con vehículos como los camiones. Es una forma, directa, rápida y económica (dependiendo del precio de los combustibles esto podría variar). No obstante, está limitada a productos de un tamaño no demasiado grande. Además, es recomendable para trayectos cortos o medios. También existen diferentes modalidades y tipos de vehículos.
- Aérea: el transporte por aire es, evidentemente, el más rápido de todos. Sobre todo, es ideal para los trayectos de larga distancia. Sin embargo, al igual que el medio terrestre, tiene limitaciones de espacio y, por tanto, de dimensiones y tonelaje de la mercancía. Además, hay que contemplar el gasto económico que supone y el impacto ambiental que genera.
- Ferroviario: en esta tipología te utilizan los trenes para mover las mercancías. Está pensado para cargas de gran tonelaje y recorrer largas distancias. Aunque tiene un menor coste que el transporte aéreo, es mucho más lento.
- Multimodal: combina dos o más medios, además minimiza los costes, el tiempo de viaje, los robos y los daños de la mercancía.
Relevancia y beneficios de la logística internacional
Según una investigación reciente, en el año 2020, el valor de las exportaciones por vía terrestre supuso más de 250.000 millones de dólares estadounidenses. Esta es una cifra que ya permite atisbar la relevancia del transporte internacional para países como México.
Incluso inmersos en una pandemia mundial, el movimiento de mercancías supone un gran impacto económico en este país. Sin embargo, también conlleva ciertas problemáticas asociadas como el cumplimiento de las normativas o el propio flujo de la economía mundial.
En la actualidad, el transporte fuera de las fronteras, también dentro, se ha encarecido por la inflación. Asimismo, las condiciones laborales de los transportistas, en ocasiones, son abusivas y esto ha supuesto una falta de personal. Sin olvidar, los problemas asociados a la contaminación del medio ambiente.
Sin embargo, a pesar de los posibles inconvenientes, la movilidad internacional de mercancías es imprescindible. Genera empleo y rendimiento económico tanto dentro como fuera del país. Además, garantiza la disponibilidad de recursos incluso si no se producen dentro del mismo. A la vez, permite reducir la dependencia de un solo lugar.
En definitiva, ayuda al desarrollo de la sociedad en general y, por supuesto, a la mejora de la calidad de vida. ¡No dude en formarse en esta área y empiece a contribuir al crecimiento de su empresa!