¿Qué es la digitalización? Habitualmente se piensa que se trata de incluir tecnologías dentro de un negocio, en la economía o en nuestra vida personal. Pero es mucho más, debe existir un proceso de transformación que permita una mejora sustancial.
Podría parecer que la situación actual, derivada del COVID-19, ha supuesto una revolución en relación con la digitalización. Y así lo es en muchos casos. Sin embargo, otros tantos han utilizado los recursos tecnológicos para hacer lo mismo que hacían antes.
Otro ejemplo puede ser la docencia virtual, en algunos países los alumnos y alumnas tuvieron que estudiar desde sus hogares. Pero en vez mejorar los procesos de enseñanza, se mantuvo la misma dinámica. Y esto, en algunos casos, conlleva aspectos negativos porque se requiere una adaptación a los entornos.
Es decir, un adolescente puede distraerse más en casa que en la escuela sin no le ofrecen los medios adecuados. Sin embargo, si se reformula la docencia puede resultar mucho más atrayente y despertar un mayor interés. Y esto es aplicable en cualquier situación, por lo tanto, es imprescindible saber qué es la digitalización para implantarla correctamente.
¿Qué entendemos por digitalización?
Hemos aportado algunas pinceladas de aquello que no es. Pero ahora es momento de explicar qué es este concepto para evitar las confusiones más habituales. Entendemos que es el proceso de transformar algo analógico a digital. Aplicado al ámbito de los negocios se hace hincapié en las acciones que permiten mejorar o evolucionar algunos procesos, productos, operaciones…aprovechando el uso de las tecnologías.
Hay que tener claro que utilizar la tecnología no siempre es sinónimo de digitalización. Debe existir una transformación entre la situación anterior y la actual. Por ejemplo el uso de herramientas digitales de contabilidad o facturación. Aunque se trata de un proceso antiguo, la implementación de la tecnología permite optimizarlo.
En el caso de las reuniones presenciales y por videollamada, la tecnología no está aportando nada nuevo. Solo la deslocalización. Sin embargo, si utilizamos otras herramientas en conjunto sí podríamos hablar de digitalizar.
¿Qué ventajas tiene digitalizar para las empresas?
De forma general, podemos decir que el mayor beneficio es la optimización en todos los ámbitos posibles. Por una parte, permite aumentar el rendimiento y productividad de los trabajadores. Esto se debe a que cuentan con recursos que les simplifican sus tareas y pueden focalizar su esfuerzo en otras.
En este mismo sentido, esto repercute en la facilidad para adaptarse a los cambios. Las empresas están más preparadas para reaccionar y, por ende, sobrevivir. Al mismo tiempo esto puede generar impacto en la reputación de la marca, aumentándola con lo que eso conlleva.
¿Qué conlleva? En primer lugar, permite atraer talento y retenerlo. Lo que supondrá que la organización continúe creciendo y ganando valor. En segundo lugar, y en relación con lo anterior, aumenta el volumen de negocio. Más y más usuarios querrán convertirse en clientes por la experiencia que puede ofrecer.
¿Cómo afecta la digitalización al sector de la formación?
La educación tradicional ya no es el único método para formarse. La enseñanza en línea ha abierto un mundo de oportunidades para aquellas personas que tienen dificultades para adaptar sus rutinas a los horarios o las distancias.
¿Pero hubiese sido posible sin la tecnología? Evidentemente no. Esta ha permitido desarrollar herramientas como las plataformas e-learning donde los estudiantes pueden tener a su disposición todos los contenidos académicos.
Igualmente, los recursos están todos integrados en un mismo sitio y puedes llevarlos contigo en tu dispositivo electrónico. Además, el acceso es ilimitado y posible a cualquier hora del día. Esto es fundamental para aquellas personas que tienen que conciliar otros aspectos de sus vidas con la formación.
En la UNADE sabemos que digitalizar es esencial en la actualidad, más aún siendo una universidad totalmente en línea. Por ello, incluimos todos estos aspectos y otros para ofrecer una formación que se adapte a los nuevos tiempos pero sin renunciar a la calidad.