Si ha estado expuesto a obras por la remodelación de las calles, al tráfico de las ciudades o si vive en una zona de ocio nocturno probablemente haya sido víctima del ruido en exceso. Hoy le contamos qué medidas puede tomar para evitar la contaminación acústica tanto a nivel personal como para protegerse en su puesto de trabajo.
Curiosamente, Ciudad de México es una de las ciudades más ruidosas del mundo. Concretamente, el aeropuerto de México es uno de los principales causantes de este estruendo casi continuo, ya que los aviones pasan por el centro de la ciudad.
¿Qué es la contaminación acústica?
Este tipo de contaminación se produce por la presencia de ruidos o vibraciones. Estos suponen una molestia o un riesgo para las personas y que impide realizar tareas comunes. Para que un ruido sea contaminante y dañino debe superar los 75 dB. Esta contaminación la provocan las actividades humanas como la construcción, el tráfico tanto terrestre como aéreo…Por tanto, es imprescindible que se cumplan las medidas recomendadas por la OMS y los gobiernos de cada país para evitar la contaminación acústica.
Consecuencias de este tipo de contaminación
Para comprender mejor porqué debemos evitar la contaminación acústica, empezaremos por exponer cuáles son las principales consecuencias que genera. Algunas de ellas son:
- Psicológicas: el ruido puede ocasionar estrés, ansiedad…
- Físicas: como pérdida de audición o algunas personas escuchan pitidos muy molestos. Los ruidos constantes y fuertes en algunas personas pueden ocasionar dolor de cabeza, aceleración del pulso, hasta infartos en casos más extremos.
- Sueño: muchas personas sufren insomnio al estar expuestos a ruidos estridentes. La OMS aconseja no pasar los 30 dB, si se sobrepasa puede perjudicar nuestro descanso.
- La contaminación acústica también puede provocar déficit de concentración, y una bajada del rendimiento. Por tanto, en el trabajo no se debería de superar los 60 dB.
- Los animales pueden sufrir miedo, estrés, incluso alterar su ciclos naturales si están expuestos a ciertos sonidos.
Cómo evitar la contaminación acústica: soluciones
Le mostramos algunas soluciones para disminuir la contaminación acústica en las ciudades:
- Cambiar el asfalto deteriorado por uno más liso, reducir el límite de velocidad.
- Promover el uso de transportes más sostenibles como la bicicleta o andar ya que este tipo de movilidad no genera un sonido estridente.
- Apostar por los coches eléctricos ya que su conducción no implica tanto ruido como los otros tipos de vehículos.
- Poner paneles o barreras acústicas absorbentes que son muy eficientes para limitar el ruido provocado por el tráfico.
A nivel personal podemos evitar la contaminación acústica si seguimos estos consejos:
- Mejorar el aislamiento de las casas: es imprescindible si queremos que el ruido no afecte a nuestra calidad de vida. Normalmente, para aislar las viviendas se utilizan paredes absorbentes con materiales como placas de yeso laminado. Por otro lado, las ventanas deben ser con cierres herméticos o doble acristalamiento.
- Controlar los volúmenes del ruido que producimos: limitar el uso de música a ciertas horas y de la televisión.
- Limitar el uso de aparatos electrónicos como la lavadora por la noche. También podemos optar por comprar electrodomésticos silenciosos.
- Utilizar tapones o cascos según la intensidad del ruido.
- Enseñar a los niños a respetar el descanso de los demás, para que no hagan ruido a ciertas horas.
- Adiestrar a los perros para que no ladren en casa, sobre todo en horario nocturno.
Medidas para frenar la contaminación acústica en empresas
Tanto a nivel interno como externo las empresas pueden producir grande ruidos perjudiciales para la salud. En este sentido, tienen una gran responsabilidad con la sociedad y con sus propios trabajadores. Por ello, proponemos algunas acciones que podrían limitar la contaminación acústica y, si esto fuese imposible, reducir el impacto negativo.
- Realización de mapas de ruido para identificar las zonas más afectadas por este tipo de contaminación.
- Sanciones para quien incumpla el límite de ruido autorizado.
- Se podrá pausar las actividades que ocasionen demasiado ruido como las obras u otras actividades.
- Ofrecer a los trabajadores materiales de protección acústica.
- Formar a los empleados para realizar un desempeño adecuado y sin generar excesivo ruido.
En definitiva, la contaminación acústica es un grave problema que debemos intentar reducir ya que es cosa de todos. Por tanto, la actuación de los gobiernos es fundamental para implementar leyes y controlar que se cumplan las medidas. A nivel individual cada pequeña actuación cuenta.
Por este motivo, si usted quiere contribuir a la reducción de este riesgo en el plano laboral, le proponemos nuestra Maestría en Prevención de Riesgos Laborales. Indudablemente, su desempeño será clave para mejorar la calidad de vida de los empleados y optimizar al máximo su rendimiento.