¡La situación de la Tierra es alarmante! El último informe del IPCC lanza preocupantes advertencias sobre el futuro más próximo de nuestro planeta: aumento de la temperatura, sequías, inundaciones, incremento del nivel del mar,… En definitiva, fenómenos extremos cada vez más frecuentes. No obstante, aún hay esperanza: ¡descubre cómo combatir el cambio climático!
El cambio climático tiene tres grandes aliados según el informe del IPCC. Estas variables son las principales emisoras de gases perjudiciales para la atmósfera y que, en consecuencia, propician los fenómenos anteriormente mencionados.
- Combustibles fósiles.
- Industria ganadera.
- Grandes ciudades.
Estos tres focos contaminantes confluyen en la sociedad actual. Hasta hace pocos años no se planteaban como parte de una problemática mundial. Sin embargo, en este momento se ha detectado que son los principales causantes de multitud de problemas medioambientales y atmosféricos. Por este motivo, tanto a nivel individual como empresarial debemos trabajar para combatir el cambio climático.
Gases efecto invernadero: antagonistas del planeta
El efecto invernadero es un fenómeno que se produce de manera natural y es beneficioso para el planeta. Se trata un proceso que permite equilibrar la energía que recibimos y la que se emite de vuelta en forma de radiación infrarroja. Los gases de efecto invernadero actúan como retenedores de la radiación y, por ende, aumenta la energía en la atmósfera.
El problema surge cuando se acumulan gases en exceso y el planeta tiene que reajustarse. Es entonces cuando aumenta la temperatura de la Tierra y, en consecuencia, surgen fenómenos adversos y el clima es cambiante. Aunque pueda parecer una modificación mínima, cada vez se hace más visible en nuestra vida cotidiana.
¿Ha notado qué hace más calor que hace unos años? ¿Siente que la primavera es menos lluviosa? ¿Ha sufrido fenómenos adversos como grandes tormentas en los últimos meses? ¿Cree que el agua del mar es más cálida ahora?
Todas estas situaciones son consecuencia de ese reajuste del planeta. En esa búsqueda de equilibrio tiene que aumentar la temperatura y, por tanto, suceden estos fenómenos con más frecuencia. ¡Pero es posible combatir el cambio climático!
¿Cómo combatir el cambio climático desde las empresas?
Las organizaciones tienen una gran responsabilidad con la sociedad y, en consecuencia, con el medio ambiente. El desempeño corporativo de manera sostenible es clave para el cuidado ambiental pero también en cuanto al rendimiento de la compañía. Es decir, es parte del trabajo de una marca en cuanto a notoriedad e identidad.
En nuestro día a día, tenemos multitud de oportunidades para contribuir a combatir el cambio climático. Desde reducir el uso de vehículos privados a la reutilización de productos como la ropa. Son muchas las opciones que nos permiten limitar nuestro impacto ambiental a través de los gases invernadero o el consumo de recursos.
Sin embargo, aunque cada gesto cuenta, las empresas, sobre todo las de mayor tamaño, son las que más influyen negativamente en el cambio climático. Es decir, la actividad empresarial tiene una gran relevancia, mayor que el conjunto individual. Por este motivo, las compañías deben esforzarse para averiguar cómo combatir el cambio climático y ponerse manos a la obra.
Recomendaciones para combatir el cambio climático
¡Tenemos algunas ideas que pueden ayudar a tu negocio! No importa si tienes una pequeña empresa o una gran multinacional, tu aporte al medio ambiente nos ayudará a todos. Aquí te dejamos algunas recomendaciones pueden servirte:
- Contar con profesionales especializados: disponer de expertos en medio ambiente, sostenibilidad,…puede ayudar al negocio para reducir sus impactos. Además, como hemos mencionado, esto repercutirá en la reputación corporativa de manera positiva. En este sentido, en UNADE contamos con una Maestría en Gestión y Auditoría Ambiental que puede ayudar a los negocios en este asunto que estamos tratando.
- Posibilitar el trabajo en remoto: siempre que sea posible, esta modalidad de trabajo permite reducir las emisiones de gases nocivos. Adicionalmente, es un aspecto que permite a los trabajadores reducir gastos y tiempos de desplazamientos, mayor flexibilidad,…
- Reducir consumo de recursos: apagar las luces, utilizar aparatos electrónicos de bajo consumo, aprovechar el papel reciclado,…son pequeñas acciones que suponen una reducción del impacto ambiental. Igualmente, se verá reflejado en un ahorro económico para la compañía.
- Concienciar a empleados y otros agentes: todo lo anterior no será posible si la empresa no muestra interés e implica a sus miembros. Por ello, es necesario tener una política que todos conozcan y estén interesados en cumplir por el beneficio que supone.
- Contratar proveedores sostenibles: si necesita trabajar con agentes externos, trate de seleccionar aquellos que estén en línea con su compromiso. De esta forma, la empresa estará creando sinergias positivas para la marca y el medio natural.
- Innovar y digitalizar el negocio: las nuevas tecnologías pueden ser grandes aliadas para mejorar los procesos, reducir recursos, optimizar el rendimiento,…todo aquello que posibilita mejorar la producción sin generar un impacto negativo.
¿Cree que puede aplicar estas cuestiones en su negocio? ¿Se le ocurre alguna otra idea para reducir los gases invernadero?